martes, 27 de octubre de 2009

Tú ahora que sabes lo que es sentir,
Tú que tu corazón late cada vez más rápido
Tú que tu ilusión se dispara día a día
Tú que tus ojos se embelecen con la brillante luz de las estrellas
Tú que tu rostro se ilumina como la mirada de un infante ante la majestuosidad de lo incomprensible
Tú que con cada nota de música te exaltas de emoción
Tú que acompañas de esperanza tus mañanas
Tú que imaginas tenazmente lo inalcanzable
Tú que alzas tus manos a un nuevo amanecer
Tu que encuentras asomos de fe en cada bocanada de aire
Tu que disfrutas del aroma del agua de mar y su espuma al rozar las palmas de tus manos,
tú que sin importar los adverso de los tiempos, te entregas a la emoción de cada acontecer
Tú que con tu simpleza de alma y con tu corazón de oro esbozan imágenes de sinceridad clandestina.
Tu que inyectas a tu ser color en cada día, mostrándole a cada uno de mis días posibilidades de inmensa sabiduría.
Tú que con tus pasos deslumbras mi ser y que con tu andar, forjas en mi andar nuevos caminos, ya antes recorridos más no reconocidos.
A TI QUE ERES QUIEN SE Refugia en la luz, Y HACE QUE DE Sí IRRADIE ALBOR.

VAN

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